1. Mi novia me pide cogerme a su mamá


    Fecha: 20/08/2024, Categorías: Incesto Autor: RRuser, Fuente: CuentoRelatos

    Cuando llegamos a la casa de mi novia Yesica, el día que me regaló su virginidad, encontramos a su mamá recostada en un sillón viendo su novela, vestida sólo con un shorts y una playera sin cuello y sin mangas, la cual dejaba casi escapar sus pechos grandes, al ponerse de pie, sorprendida intento cubrir ese par de tetas cruzando los brazos, pero esa acción hacia que se le vieran más grandes, verla así, se quedó grabada en mi mente su imagen.
    
    Después de ese día, Yesica hacía muchas referencias al cuerpo de mi suegra, hacía comentarios como "¿Verdad que ese vestido se le vería muy bien a mi mamá?" o "¿Verdad que mi mamá tiene un bonito cuerpo?". Al principio yo le contestaba con cautela, pero siempre me pedía que fuera sincero en mis respuestas, así que con más confianza yo le contestaba a todo lo que me preguntaba, obviamente mis respuestas eran que sí.
    
    Yesica y yo hacíamos el amor casi a diario, en un cuarto que yo rentaba y que estaba cerca de su casa. Poco a poco fue metiendo los comentarios alusivos a su mamá en nuestra intimidad. Por ejemplo, cuando estaba sobre mí, subiendo y bajando en mi verga, me preguntaba cómo se verían los pechos de su mamá rebotando en esta posición o como se vería de perrito o chupando una verga, a lo cual yo contestaba que se vería muy bien, aunque no se vería tan bien como mi Yesica que me cogía delicioso. Y parecía que mis respuestas le gustaban porque se venía muy rico. Con sus preguntas y sus comentarios me hacía fantasear con mi suegra.
    
    Hasta que llegó el día en que me hizo la propuesta que yo tanto esperaba. Estábamos en mi cuarto cachondeando, besándonos, diciendo cuantos nos amamos, previo a hacer el amor, nos desnudamos el uno al otro, chupé sus pezones y le daba mordiscos suaves, ella gemía despacito mientras con mis manos recorría su espalda y acariciaba sus nalgas y sus tetas hermosas, para luego besarnos entrelazando nuestras lenguas. Me recostó en la cama, fue por su bolso de mano y saco una cuerda, con ella me amarró las manos a la cabecera de la cama, me besaba y acomodó dos almohadas bajo mis nalgas así que mi verga quedó en alto, y poco a poco se fue deslizando en ella hasta que la tuvo toda adentro, se movía delicioso y yo tenía una vista maravillosa de sus tetas y su panocha llena, húmeda, hermosa.
    
    Se acariciaba los pezones mientras se veía reflejada en un espejo que acomodamos cerca de la cama para vernos mientras hacíamos el amor. Así como estaba montándome, me dijo: " ¿No te gustaría que mis pechos fueran grandes como los de mi mamá? -Me gustan los de tu mamá, pero me encantan los tuyos- le contesté. Te gustaría mamárselos? Me preguntó. Sí, quisiera acariciarlos, chuparlos, lamerlos y morder sus pezones como lo hago con los tuyos, le dije. Ante esta respuesta ella se movía más intensamente, parecía que disfrutaba mis respuestas. Y entonces vino su pregunta: ¿Te la quieres coger? Si - le contesté. ¿Cómo te la cogerías? Le mamaría las tetas y la panocha, haría que ella me mamara la ...
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