1. El plan para follarme a mi madre


    Fecha: 20/08/2024, Categorías: Incesto Autor: Slyrack, Fuente: CuentoRelatos

    Mi nombre es Diego, yo tengo 19 años estoy en la universidad, vivo con mis padres. Mi padre tiene 47 años, alto y gordo. Mi madre tiene 39 años, sonrisa amplia, piel muy clara, es delgada, con buenas tetas y culo, su pelo es de color negro; su trabajo es de secretaria, y es una persona a la que le cuesta pedir favores. Optimista, emocional y con cierta tendencia a preocuparse por los demás. Por lo hermosa que es y su personalidad cariñosa hacia mí, es que generé unos fuertes sentimientos de amor hacia mi madre, con los sentimientos que tenía y que no podía ignorar, decidí empezar actuar para hacerla mía.
    
    Un día estaba pensado en un plan para conseguir que mi madre follara conmigo, para tener ideas para mi plan empecé a leer varios relatos de incesto, después de leer como 12 relatos se me ocurrieron varias ideas para que tuviera sexo conmigo, mi plan consistiría de 3 objetivos muy sencillos, pero tenía que aplicarlos muy bien, ya que, si hacia un movimiento en falso mi plan se arrumaría, terminaría regañado por mi padre y peor se arruinaría la relación que tengo con mi madre, pero tenía que arriesgarme ya no podía con esta excitación.
    
    Al regresar de la uni empezaría a aplicar el primer objetivo, que era conseguir que mi madre y yo nos besáramos como amantes, para eso cambie completamente mi actitud dentro de la casa o cuando solo estaba con mis padres, la actitud que tome era de una persona triste, al parecer dio resultado porque reacción que buscaba llego al cuarto día, antes de ir a la uni, mi madre entro a mi cuarto y me dijo:
    
    —Hijo me gustaría hablar contigo.
    
    Yo ya sabía de qué íbamos hablar así que siguiendo la corriente y con mi actitud triste le contesto a mi madre:
    
    —¿Que paso ma? ¿de qué quieres hablar conmigo?
    
    —Ay hijo es que estado notando que tu actitud a estado cambiando drásticamente, de un día para otro te noto muy triste y eso me preocupa mucho, ¿dime tienes algún problema? sabes que yo estoy para ayudarte con lo que sea, entendido cariño —me dice mientras pasa su mano por mi cara.
    
    —Si ma no te preocupes no me pasa nada, me voy a cambiar para ya irme a la uni.
    
    Seguía con mi personalidad triste y con una actitud deprimida, mi madre lo noto, pero no seguía insistiendo y solo me dijo:
    
    —Está bien cariño nos vemos al rato que tengo que ir a trabajar.
    
    —Si ma, ve con cuidado.
    
    Bien iba muy bien el plan, pero lo crucial iba venir después, la verdad estaba muy nervioso, pero no podía retroceder, más bien no quería hacerlo, así pasaron dos días y seguía con la actitud depresiva, hasta que, en el tercer día en la tarde, mi madre volvió de su trabajo y subió a mi cuarto para volver hablar conmigo, en eso cuando entra a mi habitación, yo estaba en la computadora escuchando música mientras hacia mi tarea, ella se acerca a mí y me dice:
    
    —Hola cariño, ¿qué tal estuvo tu día?
    
    —¡Puf! Pues bien, ma.
    
    —Ay hijo, —me dijo mientras se sentaba en la esquina de mi cama—, por favor si algo te preocupa habla conmigo, sé ...
«1234...»