1. Me ganaron las ganas


    Fecha: 23/07/2024, Categorías: Zoofilia Autor: zoofilica, Fuente: TodoRelatos

    Mi nombre es Manuela, esto sucedio a mis 21 años. Soy de Barinas Venezuela y descubrí desde muy joven las maravillas del sexo virtual una noche chateando en internet, es increible como puedes hacer muchas cosas desde tu recamara.
    
    Fue en un periodo de abstinencia sexual en que me dedique a mantener relaciones virtuales con chicos, ellos me decían con lujo de detalles que me harían, me enviaban fotos, gemían y yo solo me masturbaba, era una buena sensación. Sucedió que un día uno de los chicos no era un chico sino una chica y la verdad no me di cuenta de lo bien que nos empezamos a llevar, y nos hicimos amigas. Intercambiábamos fotos y material porno hasta que un día me envío muchos videos de zoofilia.
    
    Mi primera impresión fue de asco. Mujeres montadas por perros, mamando enormes vergas, metiéndose peces en la vagina,..realmente no es muy tentador! Aun así, seguí bajando los videos y comentándolos con mi amiga de Mexico, lo cachonda que nos ponía verlos. Los relatos también formaban parte del material "estudiado".
    
    Luego de unos siete meses de ver y leer y comentar estos hechos me comenzó a picar el bichito de la curiosidad y las ganas de ver o sentir una verga animal eran grandes y lo hable con esta amiga. Ella me confeso que desde hacia unos días venia haciéndose lamer la vagina por su perro y que los orgasmos que había tenido habían sido bestiales... y que pensaba coger con el en breve. Mi problema era que no tenía perro y no podía darme el lujo de tenerlo porque vivo en un depto muy chico, por lo tanto habría de ser el de alguien el primero en saborear mis jugos . Pensé en varias posibilidades pero me decidí por el de mi prima ya que esta muy cuidado y no es tan grande. Le dije que una amiga tenía una perra en celo y quería cruzarla. Ella orgullosa me presto a Chespirito para que se lo lleve, por todo el fin de semana. Realmente estaba decidida a experimentar con ese lindo perrito todo peludito, de mediana estatura, muy educadito y mimoso, mi prima nunca se imagino que la perra en celo era yo, jejeje.
    
    En principio solo quería que me lamiera y después vería.
    
    El viernes salí apurada de mi clase en la unefa y me fui derecho al depto. Por las cosas que me decía mi amiga, ella no necesitaba de nada mas que sus olores para atraerlo, nada de miel y esas cosas que se dicen. Entre a la habitación y me saque el top, las zapatillas y luego las calzas. Mi tanga metidita entre mis piernas estaba húmeda de transpiración. Fui a la Pc y comencé a leer algunos relatos para saber por donde empezar. Planeé como hacerlo y lo hice. Llame a Chespirito a la habitación y el apareció muy contento, moviendo la cola como si supiera el regalito que le esperaba. Comencé a acariciar su cabeza con una mano y con la otra tocaba mi clítoris, mis labios.
    
    Cuando note mi mano bastante mojada, la frote en la nariz de chespirito. Fue increíble verlo lamer con desesperación mis dedos. "Ya esta!" pensé y me tumbe sobre la alfombra, me quite la tanga y abrí las ...
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