1. Keya El enema de vino. Cap.11


    Fecha: 08/05/2024, Categorías: Dominación / BDSM Autor: JorgeDom, Fuente: TodoRelatos

    Keya 11.
    
    El enema de vino
    
    Keya salió de la habitación de don Joaquín con una sonrisa plena en el rostro. Su andar era de esos que Jorge califica como de hembra bien cogida. La mañana no había terminado y era el tercer macho en el transcurso de unos días que había pasado por sus piernas. Lo que más sorprendía a la mujer era lo diferentes que eran sus machos. Estaba Jorge con una personalidad semejante a su pija, avasallando todo a su paso. Luego estaba Tomy, ese pendejo hermoso que la hacía sentirse una quinceañera. Y ahora don Joaquín, el macho veterano que tenía un costado tan desvalido como la máscara que usaba para hacerse el importante. Un factor digno de tomar registro, era que todos tenían una verga superior a la normal. Y todos la llenaban de un modo distinto, y embriagador.
    
    Jorge vio venir a la hembra con ese andar y esa sonrisa disimulada y supo que don Joaquín lo había logrado. La inexpugnable mucama, había caído en su asedio.
    
    Keya ya casi estaba delante de su jefe. El momento tan ansiado y temido había llegado. Había enojado a su dueño a la mañana temprano, y después paso eso con Joaquín…pero esa deuda la había saldado a base de rebencazos (y otras entregas), aunque con Jorge no sabía que esperar. De todas formas hizo lo que le salió en ese momento. Sin rastros de su antigua dignidad, se arrodillo ante su amo, y frotándose contra él, le aviso que todo el trabajo estaba realizado y su penitencia cumplida. Mientras hacía esto, rogaba que su dueño no la ignore.
    
    Keya agarra el almohadoncito, y se lo coloca debajo de ella, mostrándole a su jefe lo dispuesta que esta su boquita. Su jefe la mira y la acaricia la cara, ella abre su boca sumisa, así que Jorge recorre su boca con un dedo y ella lo chupa casi reverencialmente.
    
    Jorge disfruta mucho todo eso. Su mascota, recién apaleada y cogida, con el pelo revuelto y el vestido arrugado puesto malamente, pide por su perdón chupándole impúdicamente el dedo. Su dueño, compadeciéndose, la lleva hasta abajo del mostrador, saca su verga y la pone a mamar un ratito. Keya siente que fue perdonada y, contenta, se aplica a fondo. Bien a fondo…
    
    La verga de su jefe va y viene, llenándose de babas y de jugos propios, y este disfruta de las atenciones de su mascota.
    
    Hoy quería castigarla y bajarle un poco los humos. Que no piense que va la van a coger solo por poner carita de ganas. Hoy iba a ponerla todo el día en veda, para que reflexione sobre su estado, pero después surgió lo de don Joaquín, y el castigo quedo en nada, así que ahora tocaba disfrutar de esa garganta educada. En estos días esa parte de su yegua no fue muy visitada, ya que inaugurarle la concha se llevó todas sus atenciones, pero ahora iba a disfrutar un rato y diferir la doma hasta la tarde que llegara Tomy.
    
    Keya estaba más aliviada, había recibido su perdón en esa barra de carne que le atravesaba la garganta. Ella tenía que aprender, se dijo. Los arrebatos de mal humor no podían repetirse y le iba a pedir a su ...
«1234...12»