CONFESIONES - Relatos Eróticos

CONFESIONES

LA EMPLEADA DE MI JEFE - PARTE VI

Hola amig@s, soy German, otra vez para seguir con mis relatos, historias sexuales verídicos con las empleadas de mis jefes, que llegaban a la casa para trabajar como empleadas, eran unas pendejas casi toditas porque les encantaba culear por todos lados.

Una temporada, cuando mi jefe vendió su casa y no fuimos por un tiempo a vivir a la zona sur de la ciudad de La Paz. Contrató los servicios de dos chicas, una cocinera cholita de pollera de 19 años, separada de su marido y una chica de vestido de 22 años, también soltera, a ambas les rompí el culo, en diferentes ocasiones.

Pasaron dos meses que ellas trabajaban en la casa y como siempre me gano la confianza de ambas ayudándolas en todo lo que podía, la cholita se llamaba Juana, y la lavandera se llamaba Alicia, Juana nos cantaba que tenia su hijo de ocho años y este vivía con su papá, su ex marido porque se la había quitado cuando se separó de él, lloraba cuando se acordaba, dice que le pegaba casi cada día cuando vivía con el, Alicia en cambio era soltera, era de un pueblo camino a Oruro y Juana era de los Yungas.

Llegó el mes de mayo y el día de la madre, con Alicia planeamos ir a festejarla a Juana esa noche, recuerdo que era un jueves, las dos trabajaban cama afuera, o sea por las noches se iban a sus casas a dormir y regresaban tempranito por las mañanas, nos vimos en la plaza una cuadra mas debajo de donde vivíamos y no fuimos a la calle Murillo de la ciudad de La Paz donde tomamos algunas cervezas hasta que como a las doce de la noche, Juana ya estaba bien borracha y con Alicia quedamos en ir a dejarla a su casa, apenas la sacamos del bar, la subimos a un taxi y nos fuimos rumbo a la casa de Juana, en el camino, como estaba tan borracha, metí mi mano debajo de su polleras y le acariciaba sus piernas a Juana porque la sentamos al medio de los dos, Alicia que estaba también mareada igual que yo, no se daba cuenta lo que hacia mis manos, que llegaron hasta la chucha de Juana y le metía mis dedos, Juana solo movía sus piernas como si se acomodara en el asiento del auto, pero parece que le gustaba tener mis dedos en su chucha.

Llegamos a casa de Juana, le ayudamos a bajar del auto, tocamos timbre y salió una señora que dijo ser la hermana de Juana, se molestó un poco por el estado de Juana, pero le explicamos que era por festejarla en su día, pero no le pasó nada, que somos sus amigos por eso le acompañamos hasta su casa, al final nos agradeció y casi cargándola se lo mete a Juana a la casa.

Después, nos miramos con Alicia, ahora que hacemos, me dice….vamos a dormir a un alojamiento, le digo y acepta….pero dormir…dormir…sin hacer nada me dice…claro, no dudes, confía en mi, le digo……tomamos otro taxi y nos vamos a la estación Central porque ahí hay varios alojamientos, ingresamos a uno, nos registramos como esposos….una vez en la pieza, entra a la cama, me dice Alicia…..me saco mi chamarra, el pantalón y me meto a la cama……y le digo…ahora ven ...