Una deliciosa noche - Relatos Eróticos

Una deliciosa noche

Era domingo, de un caluroso verano. Mi hermana y mi cuñado iban a pasar un dia de playa. Yo acababa de cortar con mi pareja y me dijeron que fuera con ellos. No me apetecia mucho, pero habia visto el bikini que se compró mi hermana y acepté solo por verselo puesto.

Llegamos a la playa y despues de colocar los bartulos, fuimos a darnos un chapuzón. Yo salí un poco antes y me fui a la sombrilla a fumar un cigarrillo. Cuando miré hacia el agua, vi que mi hermana y cuñado venían de regreso. Casi me quemo el muslo, cuando se me calló el cicarrillo al ver a mi hermana con su bikini. Era blanco, y aunque tenía una especie de protección, se le notaba el pequeño triangulo negro de su entrepierna y las aureolas de sus tetas, coronadas por dos erectos pezones, debido al frio del agua. Observé como la miraban unos chicos que estaban en la sombrilla de allado. Incluso alguno comentó algo de su coño, que no me enteré bien.

Despues de un rato en la sombrilla, se fueron de nuevo al agua. Yo me quedé, pues no tenía muchas ganas de playa, como ya he comentado antes. Cuando regresaron. de nuevo la misma imagen. Tuve que cruzar las piernas para que no se notara mi erección. Antes no me fijé, pero al volverse y agacharse para secarse las piernas, el bikini se le metia por la rajita del culo, casi dejandolo a la vista como un tanga. Mi polla no paraba de dar latidos queriendo salir del bañador. Comomos unos bocadillos y mi hermana se echó a tomar el sol boca ariiba. Se veia deliciosa con su bikini blanco y morena, pues ya habia ido varias veces a la playa. Despues de un rato, se colocó boca abajo, dejando su culo respingón a mi vista. Fui al servicio del chiringuito cercano y me tuve que hacer una paja.

El dia pasó con las imaganes de mi hermana y su bikini mojado.

Ya en casa, pasamos la tarde charlando con nuestros padres y despues de ducharme salí un rato al bar con los amigos. Regresé tarde y todos estaban ya acostados. Antes de entrar en mi habitación, miré desde la puerta a mi hermana. Estaba dormida en ropa interior. Mi otra hermana estaba de vacaciones en casa de los padres de su novio, por lo que no había peligro de que me descubriera. Entré en mi habitación y me desnudé, poniendome solo un bañador tipo boxer. Al salir, saludé a mi padre que volvía del servicio.

.- Buenas noches... Saludé... Voy al servicio.

.- Buenas noches... Saludó mi padre... Que descanses.

Entró en su habtación y yo fui al servicio. De regreso, observé que mi padre estaba dormido, por lo que cerré mi habitación y entré en la de mi hermana, cerrando la puerta tras de mí. Me acerqué despacio a su cama y allí la pude observar, boca arriba, con unas braguitas transparentes, por lo que se le notaba el triangulo de su entrepierna y el sujetador a juego, sin tirantas, por lo que se transparentaban las aureolas redondas y sonrosadas de us tetas, coronadas por dos deliciosos pezones.

La observé durante un rato, deleitandome con esa bella imagen. Poco a poco me incliné y ...