En el autobús - Relatos Eróticos

En el autobús

... mis oídos, con los dedos de una mano me dedeaba, con la otra me apretaba uno de mis pezones debajo del top, me voltee para besarla, frente a frente metió ambas manos debajo de mi top ordeñándome los pechos, yo aferre su cadera y la encaje entre mis piernas sintiendo como se frotaba, ambas bebimos nuestras salivas, la obscuridad era nuestra cómplice, de repente el chofer dijo “última parada, acá doy vuelta y retorno” ella me bajo la minifalda y cuando prendieron las luces me tomo de una de las manos, yo dócil la seguí

Caminamos por una calle semi obscura, pasamos por un puente, dirigiéndonos en un callejón entramos en un departamento, abriendo la puerta entre a su casa y me recargo en una pared, subiéndome desesperada la minifalda, se agacho y me dio una mamada rabiosa, la sujete por los cabellos y haciendo movimientos coitales le restregué mi panocha en su boca, hasta que me corrí en chorros, la recargue en la pared y arrodillándome le desabroche el cinturón desabotonando sus botones y baje su pantalón, broto su verga de plástico, se la empecé a mamar, ella se retorcía, me paso las manos por las axilas, me levanto de forma violenta, mi espalda choco con la pared

Tomándome por las nalgas me metió duro la verga, yo levanté ambas piernas rodeando su cadera y empezó a bombear duro, ambas jadeábamos, abrazándola por la espalda le clave las uñas en su espalda, ella me tomo más de las nalgas y cogiéndome me llevo a su cama, aproveche para desabrocharle la camisa, ella desesperada se la quitó y yo le levante su bra, se me subió y empezó a follarme duro, nuestros pechos aplastados, ella babeando en mi rostro, yo bebiendo su saliva, explotamos en un orgasmo intenso, dormimos un rato y después nos bañamos

Me acompaño a la carretera para que yo abordara un taxi, en lo que esperábamos me tomo por la espalda y metiéndome la punta de su lengua en el oído en un susurró me dijo:

—¿Me das tu número de móvil?

—Claro papi.

Me marco y mi teléfono empezó a timbrar, ella sonrió, pasaba un taxi y ella misma lo paro, cuando di la dirección de mi domicilio ella misma pago, ya en el taxi le mande un mensaje diciéndole “Esperare con ansias tu llamada, para que me uses como más te plazca”, ella me contesto con dos emoticones, uno de una cara de asombro y otro de una verga escupiendo, le mande otro texto diciéndole donde se ubicaba mi trabajo, así que cuando me fuera a utilizar que me mandara mensaje temprano, para arreglarme y esperar a que llegue la hora de nuestro encuentro

Cuando por las tardes recibo un mensaje que dice “¿puedes esta noche? Te tengo ganas” se me humedece la concha, le contesto que me diga la hora estimada que nos veremos, el número de la unidad para subir a la segura, sé que esa noche la obscuridad será muda testiga de nuestro encuentro