MI VECINO DE 27 AÑOS Y YO DE 14 - Relatos Eróticos

MI VECINO DE 27 AÑOS Y YO DE 14

Me presento, me llamo Juan y esto me pasó cuando tenía 14 (actualmente tengo 19 años) iba en secundaria y era muy flaco y no muy alto, media en ese entonces 1.60 con una verga de 17 cm.

Donde yo vivía se mudó Alvaro, un «señor» de 27 años con cuerpo atlético, unos brazos grandes y un culo enorme, media 1.73 más o menos; Alvaro se mudó en la casa que está a lado de la mía, se mudó solo y trabajaba como entrenador de fútbol en una universidad.

El día que se mudó yo iba llegando de la escuela y lo vi de reojo ya que no le preste mucha importancia a la mudanza, cuando estaba a punto de entrar a mi casa pude notar que Alvaro me estaba viendo y me sonrió, a lo cual yo le respondí con otra sonrisa.

Pasó un mes y medio y lo llegaba a ver una que otra vez y lo único que nos decíamos era un «buenas tardes», «buenas noches», «que tal», nunca entablamos una conversación en sí.

Un día que iba llegando a mi casa, eran como las 2:30 p.m, encontré a este Alvaro enfrente de la puerta de mi casa usando unos shorts blancos y una playera de tirantes, se veia un poco sudado, me acerqué y me preguntó si estaban mis padres a lo cual le dije que no, me dijo que él les había prestado una manguera y que la necesitaba devuelta para poder lavar su carro, le dije que yo se la podía entregar a lo cual el dijo que sí.

Entre a mi casa y lo invité a pasar, le dije que pasara a la sala y mientras el iba caminando delante de mi, pude notar su gran culo, ya que tenía unas nalgas muy grandes; cabe aclarar que en ese entonces yo no me consideraba gay, obviamente me fijaba en los hombres pero apenas estaba descubriendo mi sexualidad. Mientras Alvaro esperaba en la sala yo fui a buscar su manguera en el patio trasero de mi casa, después de unos 5 minutos encontré la manguera y me dirigí a la sala para entregársela, se la entregué y me agradeció, antes de que se fuera le ofrecí un vaso de agua, a lo cual él aceptó, ya después de que le entregué el vaso de agua empezamos a platicar, me dijo que se llamaba Alvaro, que trabajaba en una universidad como entrenador de fútbol. Me preguntó cosas sobre mi a lo cual yo le contesté con sinceridad, me preguntó si tenía novia y le contesté que no, después me preguntó si tenía novio, a lo cual también le dije que no con una risa; yo le pregunté lo mismo y me contestó que no le hacía con la mujeres, a lo cual yo me le quedé viendo un poco sorprendido, me comentó que recientemente había terminado con su novio porque lo engañó, y yo le dije que su ex novio era un estúpido por haber dejado un hombre así de guapo y musculoso como él, Alvaro me volteó a ver y riendo me agradeció por el cumplido, me le acerqué un poco más y le dije que no había el porque agradecer mientras ponia mi mano en su pierna, no noté que a este Alvaro le incomodara que tuviera mi mano sobre su pierna a si que la deje ahí por unos minutos mientras seguíamos platicando. Después me preguntó si ya había tenido sexo, le contesté que no que nadie quería tener sexo conmigo ...