Tanga Nueva, Vida Nueva - 04 - Relatos Eróticos

Tanga Nueva, Vida Nueva - 04

... juguete de nadie, ya te lo dije. Aca todos se interesan por vos por que quieren ayudarte, seguro también sienten curiosidad y algunos pueden excitarte al verte a vos... o tus aventuras... Eso no quita que quieran que te sientas una más en la familia. Te van, te vamos, a ayudar en todo lo que podamos para que te adaptes rápidamente-

Sonó su celu, ella lo controló.

Rococó -Es un mensaje de Ana por las fotos. Escuchalo.

Ana -Bonita! Bonita mi amor! Estás mas hermosa que como te había soñado! Te amo, te amo, Te amooooooo!-

Rococó -Es toda tuya putita! Esta muerta de amor por vos la pobre Ana!-

Yo -Noooo! Esto ya parece un teleteatro mezclado con un video porno. Mejor vamos a comer que tengo mucha hambre!-

No quería hablar de ese tema, me daba miedo. La muerta sería yo por que Mía me mataría. Seguimos caminando, en un par de ocasiónes trastabliyé y al instante Rococó me sujetó. Finalmente llegamos a la casa y entramos por una puerta ancha de cristal. Contrario a mi predicción aparecimos dentro del gran comedor. Estaba muy concurrido. Quedamos un momento paradas en la puerta y como era de esperar se hizo silencio y casi todas las cabezas giraron hacia nosotras. En ese momento vi una mano alzada que parecía indicar que fuéramos hacia ese lugar.

Rococó -Vamos Bonita, Mía nos llama-

Seguimos caminando lentamente. No había notado que era de Mía la mano. Cuando nos acercamos pude reconocerla, estaba muy sonriente e interesada observándonos.

Yo -Deben estar muy divertidos viendo como camino y esperardo que me caiga en cualquier momento-

Rococó -No lo hacés tan mal. Dejate de pensar esas boludeces, en un momento estaremos en la mesa y te sentarás-

Yo -Como sabés que vamos a sentarnos con Mía? Y vos también vas a sentarte-

Rococó -Te hizo mal a los ojos el tratamiento? No vés que hay solo un lugar libre junto a Mía?- Observé y lo confirmé. Había solo una silla libre en esa mesa.

Yo -Si no te sentás conmigo, yo tampoco me siento-

Ya estábamos muy cerca. Mía se puso de pié y nos esperaba. Noté que estaba vestida formal, con un trajecito de falda y blusa muy bonito y algo ajustado que resaltaba su figura pero no demasiado. Me pareció tan atractiva como la recordaba.

Rococó -Vos te sentás a su lado y yo me quedo atrás de tu silla sujetando tu cadenita. Soy tu ama y tu esclava a la vez-

Yo -Pero... no vas a comer? Como vas a quedarte de plantón todo el rato!-

Rococó -Ya piqué algo mientras estábamos en Estética y te aseguro que voy a disfrutar mucho de estar ahí parada. Que todos vean y sepan que estás a mi cargo. Como te dije, me siento un poquito dueña tuya-

Yo -Que rara sos amiga! Como quieras-

Llegamos junto a la mesa, Mía se acercó, me abrazo y me besó en la boca con uno de sus besos mortales. Ni siquiera se privó de apretarme el hoyito delante de todo el mundo. La abracé y me dejé hacer, nuevamente su lengua invadió mi boca mientras me miraba directo a los ojos. Luego de unos momentos nos ...