1. El papito del parque (1)


    Fecha: 05/08/2019, Categorías: Gays Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos

    ... vuelta, recorriendo todo el perimetro del parque, de repente me dice "tengo ganas de orinar".
    
    Ahora sé que lo hizo premeditadamente, pues nos encontrábamos justo del lado opuesto a los sanitarios, pero también en el area mas cercana a la zona mas arbolada, que por cierto es la preferida de los novios para echarse su faje, y es en la que mas cosas hay que obstruyen la visión de los que estan en las areas infantiles.
    
    - Pero los baños están muy lejos
    
    - Sí, pero ya no aguanto. Cuida que nadie me vea, voy a hcaer detras de esta barda
    
    Estoy casi seguro que en la ultima vuelta se dio cuenta de que en esa zona no habia personas (o solo habia novios fajando, pero a una distancia convenientemente lejana) y que nadie vería lo que pasaria a continuación.
    
    Mañosamente, rodeó la barda, que no era muy alta, y comenzó a orinar dejando a mi vista su precioso pene: largo, grueso, moreno claro, circuncidado y con un poco de precum.
    
    - Deja de verme, quedamos que ya no ibamos a hablar de eso
    
    - Pero si te pones justo donde te vea...
    
    - Sí, pero no por eso tienes derecho a verlo. Además de que se supone que ibas a cuidar que nadie nos viera.
    
    - Aquí quién nos va a ver. hasta parece que escogiste este lugar a proposito
    
    - A proposito para que?
    
    - Pues no sé, sólo que se me hace mucha casualidad que se te antojara orinar justo donde nadie nos ve si hacemos algo...
    
    - Pues de tanto estar hablando de eso, ya hasta hiciste que se me parara, así que ahora te apuras a chuparmela y nos vamos de aqui para que nadie nos vea
    
    Hice a un lado mi sorpresa, aumentada por el hecho de que efectivamente se le había parado y en qué manera: ya estando en casa hice mis cálculos y debió medirle por lomenos 18 o 19 centímetros, pues mi mano solo abarcaba la mitad de su poderoso miembro.
    
    Sin pensarlo me agaché y comencé a chuparselo lentamente, saboreando su delicioso precum hasta secarlo, y metiendomelo gradualmente hasta que casi me asfixiaba.
    
    Me aguantaba las arcadas que me provocaba metermelo tanto, y seguia con mi labor lentamente, por lo que me dijo:
    
    - Más rapido, que nos van a ver!
    
    - Si no quisieras que nos vieran no me hubieras provocado
    
    - Tú, que nomás te me quedabas viendo
    
    - Pues nunca había visto uno así de rico, ni en alguien tan guapo, y mucho menos tan facilote como tú, que no queriendo al final quisiste
    
    Esto lo excitó tanto que comenzó a gemir y a gritar cada vez más fuerte, con lo que llamo la atencion de una parejita que estaba tan bien escondida entre unos arbustos fajando (o más bien, cogiendo, porque ella ya no tenía brassier y el le metía la verga por la raja con la falda levantada) y que de inmediato se asomaron para hacernos
    
    - Shhhhhh! Que nos van a cachar a los cuatro!
    
    Asi que decidi voltearlo y empezar a pajearlo de espaldas, pero cuando vi que sus nalguitas estaban mas que apetecibles, comencé a chuparle el hoyo con tanata voracidad que de nuevo comenzo a gemir fuertemente.
    
    Lo que pasó a continuación fue ...