1. Tres en un chat de telegram


    Fecha: 25/01/2023, Categorías: Fetichismo Masturbación Autor: BELLIZAMADA, Fuente: SexoSinTabues30

    Aquí estoy yo existiendo como un hongo en la vida. No miro a nadie a la cara y si estoy obligada a hacerlo por mi trabajo, finjo una sonrisa. No me interesa nada.
    
    Hace unos meses, antes de navidad, un amigo de hace muchos años me escribe para preguntarme si se cómo usar un arnés, pero yo no entendí qué tipo y le respondí que no. A los días me preguntó si yo sería capaz de ser la dominante en una sesión SD y llegar a hacer una penetración a un varón usando un arnés con dildo.
    
    Yo no soy dominante, no tengo la energía, ni se me antoja el ano de un varón, o bueno, no voluntariamente.
    
    Durante esa conversación él me pidió de manera muy insistente fotos de mis senos y vagina, decía estar muy caliente y quería sentir una penetración profunda y rápida. Yo guardo fotos de ese tipo, por si a caso y le mandé mi mejor repertorio. A su vez, él mando vídeos masturbándose y eyaculando. Si soy honesta, no me pone de humor ese tipo de cosas gráficas, me parece tedioso. Pero, él estaba así y no me quitaba nada darle gusto.
    
    Así fue como salió la idea de que yo le consiga un varón activo para que lo penetre.
    
    El plan era simple, publicar un anuncio ofreciendo trío HMH, pero con un chico bi para encuentro todos contra todos… Y la ola llegó hacía mí.
    
    Jamás había recibido tantas Dick picks en mi santa vida; hombres enormes, otros demasiado pequeños, gordos, rosas, prietos… Un mosaico espléndido de vergas calientes y palpitantes para escojer y no tener que repetir en un mes entero. El problema, todos deseaban tenerme a mí de culo, expuesta a sus órdenes, no a mi amigo. Y no es que me cause problemas tener a dos hombres peleando por meterme su verga en algún orificio, ni que ambos me lo metan a la vez en el mismo lugar, ni siquiera que me dejen llena de leche por todos lados. El problema era que yo quería que se cogieran a este chico frente a mí, mientras yo observaba desde una esquina y solamente intervenir para ayudar a meterle la verga en el culo a este personaje. Si acaso dejar que vieran mis senos o los tocaran, pero no más.
    
    Algunos candidatos eran muy agresivos a la hora de pedir una oportunidad, exigían fotos, mi número y, como requisito principal: mi coño. Era muy excitante, como caminar en un pasillo, donde a ambos lados hubiera jaulas llenas de animales carnívoros hambrientos, y yo fuera un pedazo jugoso de carne fresca, pero ninguno me pudiera alcanzar. Se me hacía agua la boca solo de pensar dejar acercarse a uno solo de esos depredadores. ¿Serían capaces de convencerme o me obligarían ya estando dentro de la habitación? Ser obligada me prende más. Ser embriagada y abusada, me excita mucho más.
    
    Total que encontramos a alguien dispuesto y acordamos vernos en un punto intermedio.
    
    Yo no alcance a llegar, ya que no encontré quién cuidara a mi hija para poderme ir.
    
    El fulano se echó para atrás y mi amigo sigue esperando a que encuentre a alguien que le cumpla su fantasía. 
«1»