1. Teo y el regalo del día del padre.


    Fecha: 25/07/2019, Categorías: Gays Autor: precozgay, Fuente: SexoSinTabues30

    ... dando, como si fuera un globo flotando amarrado a un poste, el poste venudo que mi papa poco a poco me iba metiendo despacio con firmeza, en eso sentí una punzada muy adentro y un corrientazo, como si hubiera entrado a otro anillito y pegué un gritico “aay ayy ayyy papi papi “ “shhhhh shhhhh quietecito bebe, ya pasa” tenía todos los nervios de mi cuerpo despiertos, encogí por instinto las piernas y eso hizo que de repente la cabeza se acomodara mejor allí donde alcanzaba “mi vida, se te acaba de abrir el otro anillito de dentro” yo no entendía solo me sentía más lleno que cualquier otra vez antes y que por dentro mi tunel estaba temblando todo “joder teito…dios mio….si me vas a sacar la leche tu solito bebe, que pucetica tan rica tienes..” el hablaba pero yo estaba en mi mundo, un mundo lejano lleno de sensaciones maravillosas que surgían desde el centro de mi cuerpo, mi abdomen cayo en la cama en una torsión en la que dejaba un ángulo perfecto de mi ortito levantado a su disposición, lo que aprovecho para reanudar sus empujones “y pensar que tu mama nunca me dejo hacerle la cola, mi amor…y mirate como te lo has tragado todo hasta el pegue….la mejor conchita para descargar…es la de mi nueva hembrita” “hhhummmmjjummm” “si bebe, si, ya te la voy a llenar …ya casi te lleno de juguito…ese chochito..” ahora empujaba más fuerte sentía como se ponía más dura y se hinchaba, sentía el grosor de la cabeza perfectamente “siiiii siiii así bebe, así…para rellenartela bien siii, aarrgggg arrgggg” y lo sentí, sentí perfectamente, cada brinco, cada convulsión, cada descarga, una y otra vez la cabeza se engordaba y se desinflaba expulsando su jugo, cada vez que se hinchaba y soltaba un chorro mi anillito de dentro sentía un corrientazo que me recorría las piernas, la cadera, la espalda, cuando acabo mi cuerpo aún seguía temblando, era como si por dentro me estuviera deshaciendo por completo “uummmmmjjjuuuhhhhhmmmmm” y todo mi túnel se sacudía por dentro contrayéndose alrededor de él, de ese trozo de él que tenía completamente dentro de mi “uummmmhhhhuuummmm” “ufffff bebe, me estás ordeñando la poronga con el chochi…. que divino”
    
    Cuando acabé de venir en mí y descendí de donde hubiera estado, me encontraba exhausto, chorreando de sudor, y sin embargo sentía que todo lo que necesitaba en la vida era eso, que nada, aparte de lo que acababa de ocurrir, hacía falta; ese era mi lugar. Durante el fin de semana mi papá me dio todo lo que física y humanamente su cuerpo pudo y yo estuve dispuesto cada vez, sin restricciones, no tenía reservas para entregarme y recibir lo que me quisiera dar.
    
    Y, sí, mi primo Arturo tenía razón en todo, ahora que mi papá había descubierto lo que yo era y lo que podía hacer por él y cuanto lo disfrutaba, comenzó a pasar mucho más tiempo conmigo.
    
    [email protected] 
«12...9101112»