-
Mar del Plata en los 80
Fecha: 23/08/2022, Categorías: Lesbianas Autor: Drax, Fuente: SexoSinTabues30
... profundo que fué totalmente correspondido por su rival; y mientras que esto ocurría le introdujo dos dedos en la vagina y comenzó con una penetración manual que exitó pero que simultaneamente desorientó a Mónica que se preguntó _para que hacía eso si tenía puesta una «cinturonga» que manejaba con una habilidad superlativa?…la respuesta le llegó unos minutos después de un intenso «dedeo», Susana retiró su mano de la vagina de su rival y le levantó la pierna derecha de esta envólviendola alrededor de su propia cintura y ahora teniendo mas apertura la penetró con el dildo de un solo golpe, esto hizo que Mónica por reflejo al sentirse penetrada, apretara su pierna contra las nalgas de su rival y fue cuando esta aprovechó para clavarle literalmente sus dos lubricados dedos en al culo; Mónica sintió una mezcla confusa de dolor y exitación porque por un lado la brutal e inesperada penetración anal le causó dolor pero por el otro la doble cogida a la que estaba siendo sometida la enloquecía de placer, antes había tenido anal con hombres pero nunca nadie le había hecho una doble penetración como esta y en respueta a esto apretó todo lo que pudo su pierna sobre su rival clavándole el talón de su zapato entre las nalgas de Susana y por consiguiente empujando a esta y su consolador mas profundamente dentro de su vagina. Susana descubrió que el insistente taloneo sobre su culo la estaba exitando sobre todo por que esta era una cosa que ella no conocía y entonces notó que Mónica sonriendo entre jadeos le preguntaba _te gusta putona, a lo que ella respondió con un terrible chupón que fue inmediatamente correspondido con la misma intensidad, profundidad y fuerza; y así continuó con los dos hermosos cuerpos totalmente entrelazados, firmemente trabados y profundamente penetrados por varias y simultaneas cavidades que ejecutaban en conjunto una danza erótica alucinante y ardiente acompañada solamente por la «música» de los jadeos, los insultos y los sonidos típicos de un contacto sexual salvaje; los orgazmos individuales se sucedían ininterrupidamente en una u otra hembra hasta que en algún momento ambas coicidieron en un climax terrible y supremo cuando Susana hundió tanto su pene artificial dentro la concha de su rival que literalmente la levantó del piso o sea que Mónica acabó con los piés en el aire, sin tocar el suelo. Así llegaron juntas a ese orgazmo brutal mírandose a los ojos y deseándose mas todavía, si eso era posible porque a pesar de que la transpiración de ambas que bañaba y lubricaba sus cuerpos era fiel testigo del cansacio, la enorme cantidad de adrenalina segregada por la pasión cosumida era indudablemente el combustible que las empujaba más allá de lo normal y hácia umbrales sexuales desconocidos para Mónica pero ampliamente transitados por su rival, a la cual ella se hallaba completamente entregada, así que cuando Susana le dijo enfáticamente _quiero tu culo! ella le contestó suavemente _haceme lo que ...