Me convertí en la perra de mi compañera de trabajo - Relatos Eróticos

Me convertí en la perra de mi compañera de trabajo

... zorrita ya fui suficiente amable contigo, de ahora en adelante serás mi esclavo y no tienes nada que hacer para cambiar eso

Mi segunda penetración anal en mi vida y estaba gozando como un auténtico depravado. Cada embestida provocaba como si fuera empujando mi propio semen hacia afuera, deseaba que su nectar al entrar a mi culo saliera por mi boca aún siendo prácticamente imposible. Tengo que reconocer que Jenny es todo un semental, estuvo dándole a mi recién desvirgado culo por buen rato,hasta que dijo

Jenny: nada como un culo apretado, si te portas bien quizá te permita recibir mi leche en tu culito de puta

Yo: haré lo que sea, por favor dame tu semen

Jenny: bien, solo admite que ya eres de mi propiedad y lo zorra sucia que eres

Yo: soy tuyo y solo tuyo, seré toda la zorra sucia que quieres que sea pero alimenta mi culo con dulce semen

Bien, zorra y olvídate de usar tu verga cuando cojamos otra vez. Procedió a usarme como su depósito de semen y leche empezaba a brotar de mi pito, quedando bien rellenado y con mi propio semen en la cara

Jenny: oh mierda, mira que culito más tragón se comió todo. Mira nadamás bañada en tu sucio semen como puta barata, mientras lamía semen de mi rostro

Yo: por favor, seré tu mascota pero necesito tu verga en mi vida

Jenny: soy bastante bondadosa, así que quedas declarado como mi puta oficial

Aún siendo un título tan denigrante no podía parar de agradecerle por darme esa "oportunidad" ambos nos fuimos a nuestros hogares y al día siguiente Jenny me miraba como su propiedad. Algunos compañeros me dijeron que preguntaron que había hecho, simplemente no podía responder por lo bajo que que tuve que caer, pero aún siendo vergonzoso no podía alejarme de jenny, es cómo si estuviera hecho para ser su esclavo

Pasaron los días y Jenny y yo nos quedamos hasta tarde de nuevo, me envió un mensaje diciendo que me estaba esperando en el baño de chicas. Toque la puerta y ahí estaba ella y su gran trozo de carne

Jenny: dónde mierda estabas? Esta erección no se va a ir sola, quizá esa chica nueva ¿cuál era su nombre? Ana o... Isabella? Bueno no importa. Tan pronto como escuché esa idea comense a besar su verga

Jenny: ya era hora, pon ese culo sucio sobre un retrete

Así lo hize y sentí la misma gloriosa sensación de antes. Fué aumentando el ritmo de sus embestidas hasta estar a punto de corrererse

Jenny: lo quieres en tu sucio culo o en tu cara

Tardando responder soltó su nectar en mi rostro

Jenny: nada como cogerse a una zorra un viernes por la noche

No paró de insultarme y denigrarme pero ya no había vuelta atrás, entendí que de alguna forma mi destino era complacerla

Al menos una vez por semana procura dejar a su puta personal con el culo reventado para que no olvide lo que es

Meses después...

Últimamente esta viendo mucho a una compañera, siendo aquella que mencionó cuando llegué tarde a nuestro segundo encuentro. He visto muchas veces como le toma del culo y los celos ...