Mi inicio 2 - Relatos Eróticos

Mi inicio 2

En primer lugar daros las gracias por la acogida que ha tenido mi primer relato, no pensaba que iba a tener tanta repercusión y aceptación. Gracias igualmente a todos los emails recibidos, han sido tantos que me he sentido abrumada y no he podido contestar a todos, aunque prometo que lo haré poco a poco.

Continuando con mi primera experiencia con Eva, la cual se quedó en el relato anterior en los servicios del instituto, deciros que una vez salimos de él nos dirigimos a la casa de Eva. Yo iba muy nerviosa, al tiempo que deseaba estar tranquilamente con ella.

Durante el trayecto que hicimos cada una en nuestro coche, me daba vueltas la cabeza sobre la situación que estaba iniciando, pensando las repercusiones que podría conllevar, pero el camino ya lo había iniciado y no quería dar marcha atrás.

Llegamos a su domicilio y me senté tranquila en el sofá que tenía en el salón, ella me indico si quería algún tipo de bebida, refresco, etc...

En aquel momento solo quería que empezáramos a disfrutar de nuestros cuerpos, nerviosa como estaba ante mi inicio, pero con ganas de saborear cada rincón íntimo de su cuerpo.

Eva me sorprendió por atrás y empezó a besarme mi cuello, al tiempo que su lengua lo recorría de forma intermitente, lo cual me producía escalofríos repercutiendo en mis pezones, los cuales se iban poniendo duritos y puntiagudos.

Era una sensación muy placentera la que estaba experimentando, al tiempo que con sus manos delicadas empezaba a desabrochar la blusa que llevaba con el objetivo de acariciarme mis pechos, a lo que no opuse resistencia alguna. Me sentía muy a gusto y deseaba que aquello fuera a más, me desprendió de mi sujetador y mis pechos quedaron a la vista.

Eva empezó a rozar los con las yemas de sus dedos, al tiempo que seguía lamiendo mi cuello, lo que me empezó a producir una sensación maravillosa y húmeda en mi entrepierna. Notaba como por momentos la humedad iba en aumento y me deje llevar por ella, aceptando de muy buen agrado lo que me estaba haciendo.

A continuación Eva dio la vuelta al sofá y se entretuvo con mis pechos, empezó a lamerlos de forma alternativa al tiempo que me desabrochó el botón de mi pantalóncito.

Aquello iba increscendo, abrió la cremallera y de forma delicada fue deslizando el holgado pantalón que llevaba dejando mi cuerpo prácticamente desnudo, cubierto solamente con mi tanga.

Tras ello siguió lamiendo mis piernas a todo su largo produciéndose mucho placer al tiempo que me abría las piernas con la intención de ir concentrándose en mi zona púbica, lo cual logro tras desprenderse de mi tanga.

Aquello no tenía marcha atrás y deseaba que fuera a más, tal como ocurrió, dado que me sentía muy húmeda cuando note como su boca y su lengua después de estar recreándose en la zona púbica y adyacentes se posó en mi secretito.

Aquello hizo que mi cabeza perdiera la noción del tiempo, dado que fue tal el placer que sentia que me deje llevar por ella, la cual parecía toda una ...