1. Mi nietita, se convirtió en mi amante – parte II


    Fecha: 10/07/2019, Categorías: Incesto Autor: crayzzygary1, Fuente: SexoSinTabues30

    ... tratar de meterla sin previo masaje para dilatar su pequeño esfínter. Tomé mi verga por el troco y se la metí por entre las piernitas con dirección a sus labios vaginales, Jeorgina ahuecó sus piernitas para hacerle espacio a mi tronco, con total naturalidad. Obvio que no la asustaba el tamaño de mi verga a pesar de sus 20 X 6cms. Es más, Ella misma tomándolo con su manita se la sobaba entre sus gorditos labios masturbándose con mi pija. Eso me tenía muy excitado y a punto de acabar. Así es que la hice ponerse de frente a mi, le puse la verga en los labios y ella solita abrió la boca y se metió media poronga dentro. Me comenzó a dar una mamada de novela, les juro que se mete la pija hasta la garganta sin hacer arcadas. Y claro, no duré ni dos minutos y le llené la boca de semen, chorro tras chorro, y ella se tragó todo, no desperdició una gota. Sonriendo abre la boca y me muestra todo el semen sobre su lengua antes de tragarlo. Es una putita hermosa mi nieta. Pero claro ella continuaba excitada, por lo que la tomé en brazos y así mojados como estábamos nos fuimos a la cama, donde sin hacerme rogar le pegué una tremenda chupada de concha que la hizo tener un orgasmo tremendo, gemía, suspiraba, me arañó la espalda. Tomé el lubricante de sobre la mesita de luz, unté con abundante gel mi verga y su cuevita que estaba resumiendo jugos a más no poder, y ni siquiera le pregunté, le separé los labios con los dedos de la mano izquierda, y tomando la verga desde el tronco se la puse en la entrada de su caliente caverna virginal. Con sus jugos y el lubricante la poronga se deslizó rápidamente y sin trabas hasta su himen, y de un pechón le rompí el virgo y me enterré en sus entrañas hasta topar con su útero, prácticamente toda la verga le había entrado, el grito que pegó fue tremendo, pedía que se la saque que le dolí mucho, que le ardía, pero ya estaba empernada y por nada del mundo le sacaría la pija, no hasta que le pegue una buena cogida.
    
    De a poco se fue acostumbrando al tamaño de la verga, sus paredes vaginales apretaban mi rabo al extremo, luego de un ratito, cuando ya se tranquilizó, tomé envión y comencé a serrucharla, de a poquito, pronto era ella quien salía al encuentro de mi tripa, cosa de no creer esta pibita, se banca una verga de 20 x 6 y ni se queja, es más lo hace con gusto la putita. Pronto la tuve al borde de otro orgasmo y más rápido la cogía, parecíamos un carrusel desbocado, logró un segundo orgasmo, su conchita estaba inundada de flujos, gel y la sangre de su virgo. Le levanté las piernas y las puse sobre mis hombros, tomé gel y unté su ano, metí primero un dedo y luego dos con mucho lubricante, además de que le corrían jugos por la rajita del culo, le presenté la cabeza de la verga a su culito y empujé, suave pero con firmeza, y pronto su esfínter comenzó a tragarse mi pija, ni un quejido de la pendejita, le entró toda, hasta los testículos, me miraba seria, concentrada en sentir el pedazo de carne, una vez penetrada hasta el ...