Exámenes finales. - Relatos Eróticos

Exámenes finales.

... un dedo

-No soy… no soy lesbiana, déjame...-. Dije y ella me sonrió

-¿Estas segura? ¿crees que no he notado que siempre me estás mirando? ¿o que nunca he oído como me defiendes de todos? Oh, y seguro tú ni enterada que somos vecinas. Sé lo que buscas en internet todas las viernes por las noches—En cuánto dijo eso mi cara sonrojó aún más—. Lo sabía, es obvio. Sin embargo... aún defiendes ser hetero, pero qué linda eres—Ignoró un momento su examen y estiró con la mano izquierda el elástico de mi tanga viendo hacia todos lados que nadie nos prestara atención. Y así era, a todos les preocupaba más su examen y la profesora estaba ayudando con dudas a un compañero así que aprovechándose de eso, la bajó hasta mis muslos, un poco antes del final de mi falda, dándole libertad a su otra mano. Luego volvió a su examen.

—N-no sabes lo que dices, detente…— Ignoró mi petición y metió otro dedo, los dejó quietos un segundo y mientras yo copié un poco más, lo suficiente para que mi calificación estuviera dentro de lo necesario y para que Angie se aburriera de estar quieta, comenzó a mover hacia el frente sus dedos, por la posición en la que estábamos, la palma de su mano quedaba contra mi clítoris, haciendo que su movimiento estimulara más de lo que había sentido antes. Ahogué mis gemidos y ella comenzó a moverse más rápido. Tocaba tan bien

-Qué estrecha estás ¿acaso nunca te habías masturbado?-. Me sonrió de forma muy traviesa y riendo por lo bajo.

-S-sí lo había mmhm sí me habia ttocado antes

Tenía que hacer un gran esfuerzo para no gemir, yo me había tocado demasiadas veces antes pero sus dedos eran más largos y un poco más anchos que los míos.

Además era la primera vez que una mujer me tocaba.

-Pero te encanta que lo haga yo ¿no es así? -. Tenía razón, no le iba a poder mentir, así que me dejé llevar

-S-sí.... Me... Me enca-encanta-. Se rió y miré el reloj. Quince minutos para que acabara el tiempo, no quería que se terminara. Suspiré muy pesadamente e intenté no hacerlo, pero mi cuerpo habló por si sólo y empecé a tocarme los senos. Moví mi sostén a un lado sobre mi camisa y me acaricié los pezones intentando ser discreta, Angie se rió y dió la vuelta a su hoja, indicando que había terminado. Hice lo mismo y seguí tocandome los pechos

-Tus tetas... Son muy lindas-. Dijo mientras usaba su pulgar para acariciar mi clitoris aún más rápido, entonces justo cuando iba a contestar que era vergonzoso, me sentí aún más extraña. Me retorcí, incapaz de si quiera mirarle o decir algo coherente

-Estás por llegar ¿cierto?-. Dijo mientras me miraba y yo sólo asentí, perdida en aquella sensación tan buena... Se sentía malditamente bien. Siguió haciendo el mismo movimiento de atraer sus dedos más rápido hasta que logró hacer que me corriera, mis piernas eran puros espasmos, intentaba no ser obvia pero estaba roja y temblando. Gemí cuando sentí que sacó sus dedos y luego tiró su estuchera a propósito. Se levantó para recoger todos sus lápices ...