Ahora me tocó a mi - Relatos Eróticos

Ahora me tocó a mi

Luego de sentir como David me follaba la boca y tomar un poco de su semen, mis ganas de sexo eran más.

Al mostrarle mi lengua a David, se acercó a mí y me dio un beso muy apasionado, como si su vida dependiera de ello, sentí su lengua rozar mis labios y tocar mi propia lengua, se sentía suave, húmeda (solo recordarlo me excita) como pudimos nos levantamos y acomodamos de nuevo en el sofá, esta vez yo acostada boca arriba y el sobre mi, la posicion permitia que sintiera como su pene volvia a ponerse duro, esta vez presionando mi pelvis.

Tenia mis piernas abiertas y las uni tras su cintura, sentia su lengua en mi, sus manos en mi cadera, se aparto de mi diciendo.

David: te deseo.

Yo: hazme lo que quieras.

Acto seguido se Quito su ropa quedando totalmente desnudo, volvio a recostarse encima de mi, pero esta vez fue a mi cuello, sentí la gloria y más humedad en mi vagina, a estas altura gemia suave con cada beso que me daba, poco a poco sentí como bajaba a mi vientre, levantando por encima de mis senos mi blusa manga larga.

Pasaba su lengua sobre mi ombligo, sus manos, era toda sensación, no paraba de gemir y retorcerme, estaba tan fuera de mi que no recuerdo como me quito toda mi ropa dejándome solo en el cachetero. Volví en mi en ese momento ya que no sentí su presencia y escuche decir

David: eres hermosa, simplemente una diosa, me sonroje.

Bajo su cabeza muy muy cerca de mi vagina ya no aguantaba más deseaba sentir su tacto. Pero David jugaba conmigo me hacía sufrir, pero me gustaba la sensación y lo dejé jugar, sentí como paso su lengua levemente entre la cara ínterna de mi muslo y mi vagina, rozando su lengua con parte de mi cachetero. un gritillo salió de mi, su lengua sobre la tela que cubría mi sexo, fue la gloria sentí como moje aún más.

Yo: por favor no me hagas esto. Fue lo único que pude decir

Acto seguido me levanto la cadera y bajo mi prenda

David: me encanta que estés tan mojada

Un hilo seguía uniendo mi vagina con la tela de mi prenda. Sentí la lengua de David pasar sobre mi, (ufff me enciendo aún al recordarlo) disfrutaba cada sentimetro de su lengua, frotaba de un lado a otro sobre mis labios, hundía su lengua tocando mi clitoris, bajando de nuevo hasta la unión de mi culito con mi vagina, fue fantástico sentir su lengua.

Tanto morbosidad me iba hacer explotar y fue cuando separo mis nalgas y comenzó a lámer el círculo de mi ano, no aguante más y me corrí, votando aún más fluidos, sentí como corrían por debajo y como David los recogía con su lengua, volvía a pasar su lengua desde mi ano al clitoris, la sensación me hizo arquear y apretar mis piernas con su cara en medio, per9 no fue impedimento para que siguiera dándome tan delicioso oral, levantaba más mi cadera permitiendole jugar más con mi ano. Metió su lengua en mi vagina y comenzó a penetrarla era excitante, moroso y delicioso, lo apreté con mis manos y otro órgasmo me invadió.

Se separo de mi vagina y pude ver como me observaba ...