1. Uno de los mejores lugares donde he follado


    Fecha: 30/12/2021, Categorías: Fetichismo Autor: Selene, Fuente: CuentoRelatos

    Hola queridos y queridas, hoy quiero contaros otra de mis experiencias sexuales y "fetiches" que tengo, no es tener sexo en lugares públicos como un ropero, un baño público o un callejón (aunque siempre me ha dado morbo). Sino que me encanta tener sexo en el campo, a la intemperie y si es de noche mejor. Pero hubo una vez que fue especial y no por el hecho de que mi pareja de aquel momento me haya follado bien, sino que eran días de lluvias por lo que el ambiente tenía ese aroma a tierra mojada que a todos nos gusta, ese fue el toque especial, os lo cuento:
    
    Nosotros íbamos a un descampado que se llegaba siguiendo un camino para luego desviarnos cuando estábamos cerca de dicho lugar, íbamos ahí para ver las estrellas y también para tener sexo a la intemperie. El día de antes había llovido y había un clima húmedo en el ambiente, (cabe destacar que era primavera) el olor a tierra mojada inundaba el ambiente, la luz de la Luna nos permitía ver por donde íbamos y pisábamos y además se podía escuchar el agua correr por un riachuelo que había cerca que se llenaba solo en épocas de lluvia, era el ambiente perfecto, casi idílico.
    
    Al llegar vimos el cielo, algunas estrellas se podían ver pero también veíamos cómo unas nubes se acercaban poco a poco.
    
    -Quizás no debimos venir, va a llover seguro. -Dijo mi pareja.
    
    -No creo, hagámoslo rápido.
    
    Al decirlo empecé a quitarme las prendas: comencé por la sudadera y la camiseta que llevaba por debajo dejando mis pechos al aire, también me deshice de las deportivas y los pinky dejando que las plantas de mis pies tocasen el césped húmedo y frío. Mi novio ya tenía casi todo quitado menos los boxers, se acercó a mí y me empezó a bajar los leggins más el tanga que llevaba por debajo, acercó su cabeza a mi coño, empezando a lamerla. Sentí como su lengua jugueteaba entre mis labios y buscaba mi clítoris a la vez que me apretaba el culo con sus manos, yo agarraba su cabeza para empujarla suavemente a mi vagina más unos movimientos pélvicos que hacían del oral algo más placentero y orgásmico.
    
    Tras ello él se levantó, le quité el bóxer dejando al descubierto su pene erecto, lo agarré con las dos manos masajeándolo mientras me metí sus dos huevos en la boca, estaban depilados por lo que su tacto era muy suave y en cierta parte me resultaba hasta placentero tenerlos en mi boca. Después de comerme sus huevos fui a devorar su polla ya más dura que antes, dentro de mi boca acaricié con mi lengua su glande, estaba muy caliente y deliciosa, mientras le hacía una mamada me acariciaba el coño con una de mis manos para excitarme.
    
    Después de un intenso oral y unos besos, me tumbé boca abajo en el césped: el tacto de mi piel con el suelo era muy agradable, estaba todo mojado y sentía como mi cuerpo se estaba mojando, los pechos apretados contra el suelo y mi cara sobre la vegetación. Esa agradable sensación se sumó con la penetración que tanto ansiaba, me la metía lento y sin esfuerzo ya que mi vagina estaba húmeda ...
«123»