1. Mi prima Karla, nuestra primera vez


    Fecha: 19/11/2021, Categorías: Primera Vez Autor: Alien_system, Fuente: CuentoRelatos

    ... juegos que habíamos ejecutado en las noches que salimos a divertirnos, algo despertó entre ella y yo, ella era de complexión delgada casi nunca engordo de más, tenía bonito cuerpo, morena clara su piel, sus facciones finas nunca sufrió de acné por lo que su rostro era terso y con su nariz respingada, la verdad Karla era como una afrodita morena.
    
    Anteriormente en nuestros juegos de escondidas hubo algunos roces o tocamientos con ella, pero nunca más allá precisamente por el vínculo familiar tan estrecho. Casi como de hermanos. Por eso a esa alturas de la vida estaba uno más enfocado en las vecinitas y claro a veces en las comidas familiares salían las bromas del “noviazgo” con x o y vecinita, y mis primas pues entre recelo solo hablaban mal de aquellas vecinas que eran una especie de “zorritas” en fin, no sabía si había otro interés en esas “discusiones” por demostrar los cascos ligeros de algunas vecinas con las que nos reunimos en las tardes-noches para “jugar”.
    
    Algo sucedió en alguna ocasión que recuerdo que estábamos una tarde ella y yo solos en casa de la abuela. Ella empezamos a bromear al respecto de las “Zorritas” a las que pretendíamos los varones y empezó a molestarme mientras yo estaba sentado en un sofá en la sala, recuerdo que esa tarde ella llevaba puesto aún su uniforme de la escuela, falda cuadros gris arriba de la rodilla, blusa blanca, suéter y con sus blancas calcetas casi a la rodilla, empezó a hacerme burla con aquella vecinita que no se me había hecho con ella pero su reputación entre los del barrio no era muy respetada. Intentaba no hacer caso a sus burlas ella se vio obligada a hacerme cosquillas entre burlas y reclamos, ella estaba sobre de mi en ese jugueteo y en algún momento las cosas se salieron de control ya que por defenderme de sus piquetes, yo había tocado algunas partes de su cuerpo. Era la primera vez que tocaba y pensaba así a mi prima, o tal vez en alguna de las tantas chaquetas que me hice de joven viendo alguna revista o película porno si salió ella como la protagonista de esa caricia tan íntima.
    
    Pero tener así a Karla en ese momento había movido nuestras fibras. Había sentido sus formas por encima de su uniforme. Se sentían unos piernas muy bien torneadas y sus pechos pequeños, pero lo suficiente como para caber en mi mano. Había sido un juego torpe como mis movimientos. Sí nos habíamos calentado demasiado hasta llegar a probar nuestros labios. Ella estaba aún sobre de mi, mientras experimentamos los placeres de esos primeros besos.
    
    De repente ella se apartó inmediatamente de mí, se acomodó el uniforme y se fue al cuarto de una tía en común. Por un momento me dejó perplejo el cambio de actitud de ella. No sabía si algo había salido mal o que pasaba, pero me había dejado con tremenda erección. Ya sabía reconocer ese líquido preseminal brotando de mi joven verga como las veces que las vecinitas me dejaron caliente, pero esta vez era Karla quien había provocado esa reacción en mi. Aún desconcertado ...