El Viaje de Fin de Curso 10 - El Princesa - Relatos Eróticos

El Viaje de Fin de Curso 10 - El Princesa

... celebrar el final del Ramadán y recibir las bendiciones y regalos del viejo Emir, en vez de ser este quien apareció en el balcón del palacio, fue el comerciante, con la cabeza del Emir en una mano, mientras con la otra abrazaba a la joven que sostenía al recién nacido en sus brazos.

Algo asustados por los rumores que circulaban sobre el comerciante, pero sobre todo muy cansados de la tiranía del viejo Emir, los habitantes de Kanaan vitorearon a la pareja aceptándoles como sus nuevos gobernantes, dando inicio a una dinastía que dura mil años.

Nadie sabe el origen exacto del comerciante y la bella joven, ni siquiera sus nombre reales, a la joven le dieron el nombre de Nabila, ‘La Perla del Desierto’ en el dialecto de los nómadas, nombre que desde entonces lleva siempre la primera hija del Emir, al comerciante le llamaron Ghazi, ‘Remolino’, por el extraño efecto que quedó en las arenas del oasis cuando desapareció delante de los soldados, dando nombre a la nueva dinastía.

Tan misteriosa como fue su aparición aquella mañana en el balcón del palacio, fue su desaparición una semana después de que el Príncipe Susej cumpliese los dieciocho años. Nunca se volvió a ver a la pareja, aunque en varias crónicas de la época se cuenta que fueron vistos en palacio la noche que a los noventa y dos años, tras un largo y justo reinado, el Príncipe Susej partió a reunirse con el Profeta.

Ahora el viejo palacio sigue siendo una prisión como lo fue hace mil años, sobre todo para las jovenes turistas que engañadas acaban en poder de Ntomi, esclavizadas y obligadas a satisfacer las perversiones de los clientes. Ntomi ya era una amenaza en los tiempos del difunto Emir, pero ahora es el principal obstáculo para los intentos de apertura del Príncipe Caleb y de la Regente, llegándose a jactar abiertamente de ser él quien realmente gobierna el Emirato.

Mientras nos vamos acercando a nuestro destino no puedo evitar recordar mi primera visita al ‘Princesa’ y todo lo que ocurrió aquella noche.

‘Mi padre nos va a matar;’ recuerdo que me dijo Vincent cuando detuvimos el todo terreno que le habíamos quitado a su padre para ir al ‘Princesa’, ‘Me tiene terminantemente prohibido venir aquí;’ siguió protestándome mi amigo.

Los recuerdos vuelven nítidos a mi mente y me parece estar viviendo de nuevo ese momento.

‘Bungami no te hará nada cuando le digamos que estuviste conmigo;’ le contesto a Vincent, ‘Llevo años oyendo hablar del ‘Princesa’, y ahora que por fin soy mayor de edad y he venido con algo de tiempo a Kanaan no voy a perder la oportunidad de ver en persona si es verdad todo lo que dicen.’

En cuanto entramos al local, los olores procedentes del tabaco, el hachís y el sexo golpean nuestros sentidos abrumándonos, todo es mucho más extremo de lo que me había podido imaginar basándome en los comentarios de los trabajadores de las minas cuando las visitaba junto a mi padre.

Por todos los lados hay gente follando, la mayoría de las chicas están rodeadas ...