1. Follando con un desconocido en su auto


    Fecha: 11/06/2019, Categorías: Sexo con Maduras Autor: Lorena, Fuente: TodoRelatos

    Esta semana un atardecer caluroso decidí bajar a comprar una botella de vino, salmón ahumado y una ensalada preparada para hacerme una cena fresca. Me puse un vestido corto de playa y sandalias de tacón para bajar. El vestido tenía un escote amplio que mostraba bastante de mis tetas de 100 cm. Tampoco cubría mucho más que las bragas. Pero con 41 años estoy bastante crecida como para vestirme como me apetece. Notaba muchas miradas por los hombres que estaban cerca de mí.
    
    El vino que quería llevar lo habían puesto en el estante de arriba y a pesar de llevar tacones con mi 1.60 metros me costaba llegar a cogerlo. Me estire tratando de alcanzar la botella y se me subió un poco la falta. Lo suficiente como para que un hombre de unos treinta años y 1.90 m que también estaba en el lineal de los vinos pudiera ver la parte baja de mis glúteos. El hombre se acerco y me dijo, deja que te ayude, poniendo su espalda bastante pegada a la mía. Gracias, respondí. ¿Cuál quieres? Dijo él, quien desde su estatura podía ver completamente mis tetas por el escote. El la cogió y me la dio y me dijo tiene usted un buen cuerpo. Gracias, le respondí. El hombre entonces se puso detrás mío y me sobo el culo. No lo rechacé. Luego dejo mi culo y me amaso las tetas. A los cinco minutos me vámonos que aquí ahí cámaras y gente. Al llegar a una de las cajas registradoras tuve que esperar en la fila. En fue a otra caja. Terminó de pagar y salió por la puerta principal, yo lo seguí con la mirada.
    
    Al salir yo veo salir del estacionamiento un deportivo oscuro. Se freno junto a mí y lo conducía el hombre del supermercado. Me ofreció acercarme. Acepté y subí a su auto y me dijo: oye eres hermosa. En un semáforo en rojo empezó a besarme el cuello. Yo explotaba de ganas de follármelo. Le puse mis tetas entre la boca y empezó a lamerlas. Él se detuvo por que el semáforo se habría puesto en verde. Entonces empecé a tocarle la polla. Me agaché y abrí su pantalón. Mojé mis labios y pasé mi lengua por todo su pene. Él me tocaba las tetas con una mano y empecé a meterme su polla a mi boca. Él detuvo el auto y me dijo que parase que así tendríamos un accidente. Entonces le propuse que aparcara en el estacionamiento cubierto de mi urbanización.
    
    Una vez aparcados él hecho su asiento lo máximo posible hacia atrás y yo me monté en él mientras él chupaba mis tetas. Jugué con su polla en mi clítoris y me la metí de un golpe dentro del coño. Empecé a subir y a bajar hasta que me corrí. Como me dio calor me quite el vestido y le mame la polla. Estuve mamando hasta que el no aguanto mas y me dijo que se iba a correr. Yo le dije, espera, quiero darte mi culo. Me monto nuevamente sobre él pero ahora hago que su polla me entre por el culo. La polla no era de tamaño normal con lo cual con mi experiencia en sexo anal no me coste mucho comérmela. Mientras tenía su polla en el culo le puse mis tetas en su cara y le dije cómemelas. Gemí de placer, cerré los ojos y me dejé llevar por sus embestidas. El ...
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