La nena del kiosco 3ra y ultima parte - Relatos Eróticos

La nena del kiosco 3ra y ultima parte

... una mano se metía los dedos en la conchita, nunca pensé que una nena de esa edad se pudiera mojar tanto, y con la otra le pellizcaba suave los pezoncitos casi inexistentes, la nena tenía los ojos cerrados y subía y bajaba como si estuviera cogiendo a mis dedos.

Ni se cuánto paso, que ya tenía la poronga como una piedra nuevamente (¡¡¡bendita juventud!!!)

Ya lo tenía en posición, para ensartarla…

Yo: ahora te voy a meter el pito en la chuchis nai

Naiara: ay si, dale, méteme el pito, no aguanto mas

Y se la mande a guardar de una, sin miramientos, era como un cuchillo caliente en manteca, entro como si nada supongo que ya se había comido porongas más grandes porque no se quejó. Los dos largamos un ahhhhhhh al unísono.

La deje unos segundos así, le puse las piernitas en mis piernas y la empecé a taladrar, muy despacio, quería disfrutar esa ricura centímetro a centímetro, no había apuro, me apretaba la verga como si fuera un guante, tenía labios chiquitos y el agujero justo, apretaba y me daba un gusto terrible.

Empezamos a tomar más ritmo con el correr de los min, de un momento a otro me levanté con la pija en la concha y la puse boca abajo arriba de unos de los freezer y le empecé a dar sin asco.

Yo: ¿esto es lo que querías putita?, hace días que me venís calentando, como chupabas el helado

Naiara: ay si, pensé que no te ibas a dar cuenta, dame más, me gusta

Yo: no es que no me di cuenta, es que no me puedo arriesgar bebe. Querías pija, acá tenes pija, te voy a coger hasta que se me caiga la poronga

Naiara: ¡¡¡si, si, si, seguí así, me gusta!!!

Eran tantas las ganas que le estaba serruchando la concha de una manera increíble, que sabía si se iba a volver a repetir, me dije, le doy para que tenga, guarde y archive. Se escuchaba clap, clap, clap, cuando mis piernas y mis bolas chocaban contra su culito. Las piernitas de dai, se movían para todos lados. Ella se agarraba de la parte de atrás del freezer, y no paraba de gemir.

Yo: sshhhhhhhhhhh no hagas tanto ruido, nos van a escuchar de afuera

Naiara: es que me gusta mucho

Yo: trata de hacerlo despacio así no nos enganchan

Y la seguía taladrando, nunca había probado una conchita que me apretara de esa manera la pija, la nena no sé cómo hacía, pero contraía la concha y era como si me la chupara. Pero esto no iba a quedar así, yo le quería hacer la cola, tenía que parar porque no iba a aguantar mucho más. Se la saque, a nena me quedo mirando cómo no me dejes así, fui a buscar una crema de cacao de las que vendía y le dije…

Yo: abrite las nalguitas bebe, te voy a poner esto, así te puedo meter el pito en la cola ¿quieres?

Naiara: pero hacelo despacio, porque siempre me termina doliendo mucho y me cuesta caminar

Yo: tranquila nai, lo hago despacio, la idea es que disfrutemos los dos como hasta ahora, ¿o no te gusto?

Naiara: si hasta ahora sí, me gustó mucho. Si me prometes que lo haces despacio está bien.

Yo: bueno, abrite las nalguitas

Asi ...