1. A metros de su novio


    Fecha: 27/05/2019, Categorías: Infidelidad Autor: rickmaster16, Fuente: CuentoRelatos

    ... Dijo Gina refiriéndose a Luis y a mi.
    
    - Estoy seguro que sí - Respondí y todos reímos.
    
    Gina se fue acercando más y más a mi, un poco víctima del efecto de las cerveza y un poco sin importarle que Luis y Verónica se pudieran dar cuenta de que algo pasaba allí. Desde donde estábamos podíamos ver el largo pasillo en donde estaba el apartamento. En el apartamento estaba el novio de Gina y nuestro anfitrión atacando los controles del PlayStation.
    
    Di una rápida mirada por el pasillo, no vi a nadie venir, miré a Gina que me sonreía y planté mi boca sobre la suya. Me respondió y nos besamos en frente de Luis y Verónica. Ellos ya sabían que algo pasaba allí pero no dejaron de expresar su sorpresa por la situación.
    
    A partir de ese momento fueron cómplices. Gina y yo nos besabamos ebrios a pocos metros de su novio que estaba jugando videojuegos mientras Luis y Verónica se besaban también. Pronto estuvimos los cuatro juntos y las manos de todos exploraron los cuerpos de los demás. Con una mano yo sujetaba una nalga de Gina mientras con la otra masajeaba un seno de Verónica. Luis agarraba la otra nalga de Gina y con la otra mano apretaba una nalga de Verónica.
    
    Llevé a Gina al gran sillón de cuero café, ella se acostó, separó sus piernas y las levantó para dejar sus rodillas en alto y ampliar sus ángulos para mi. Metí una mano entre sus piernas, corrí su tanga e introduje dos dedos en su coño. Mi mano se empapó de sus fluidos.
    
    Desde mi posición tenía vista directa al pasillo por si el novio de Gina o alguien más aparecía. Pero no apareció nadie. Al voltear la mirada vi que Verónica estaba en la misma posición que Gina y Luis masajeaba sus partes sobre un apretado jean. Si bien interactuaban entre ellos Luis y Verónica permanecían atentos a lo que hacíamos Gina y yo. Frente a todos saqué mi mano del coño de Gina y llevé los dedos a mi boca. Viendo directamente a los ojos de Gina saboreé los jugos de su vagina húmeda.
    
    Se hacía tarde y tenía que llegar a casa con mi chica. Como todo fue más bien un juego no tuve oportunidad de venirme así que me fui a tomar un taxi con el pene duro. Bajé al primer piso y al salir a la calle subí la mirada para ver a Gina y a Verónica mirándome.
    
    - ¿Lo vas a dejar ir así? - Le dijo Verónica a Gina.
    
    - Lo calenté para ella - Le respondió Gina refiriéndose a la chica que me esperaba en casa.
    
    Llegué a mi casa a punto de explotar. Mi chica estaba acostada, dormida boca abajo, tenía una bata morada como pijama y se le asomaban las nalgas. Me quité la ropa y me puse en cuatro frente a su culo. Ella solía dormir sin ropa interior así que no tuve obstáculo alguno, mi lengua se buscó lugar entre sus nalgas y se adentró en su ano.
    
    Ella se levantó exaltada, me miró asustada tratando de racionalizar la situación. No dije nada, me acerqué, la besé y dirigí su cuerpo para que se pusiera en cuatro. Le metí la verga, sus nalgas grandes rebotaban contra mi tras cada empujón. No tardé mucho en venirme, ya venía casi ...