1. Emputecimiento esposa


    Fecha: 04/05/2019, Categorías: Erotismo y Amor Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos

    Nos hicimos novios y en ese tiempo no faltaron buenos momentos.Mi primer abrazo por detrás sobando sus pezones me hicieron ver claramente su satisfacción , su abandono total al placer .
    
    Ello me llevó a acosarla continuamente.Era y sigue siendo una buena hembra.
    
    Por eso ya con el matrimonio pensé que el juego erótico le gustaba.
    
    Aprendimos técnicas y complacencias mutuas.
    
    Allí descubrí sus íntimos secretos.
    
    Soñaba con su ex y con mi hermano.También tenía un compañero de trabajo que la volvía loca . Y dije para mi que verla puta y presenciar dichos encuentros de sexo a mi me podía complacer.
    
    La estimulé, la volví exhibicionista y ella posesa.
    
    Por fin un día dió el paso.
    
    Pensaba que mi deseo era verla feliz pero ella no quería mi presencia . Y añadió que los elegía ella.
    
    Después de los encuentros me ponía al corriente de sus avances y me masturbaba con sus susurros.
    
    Hoy gracias a su buen hacer disfrutamos de una vida cómoda y participo en la elección procurando ver en los más mayores a aquel que pueda poseer más pasta.
    
    Ella hace el resto y me tiene cachondo y me cuenta las verdulerías que le cuentan y le hacen.
    
    El tiempo pasa y los cincuenta años empiezan a pesar en su rostro y en sus carnes.
    
    Por un lado mejora porque ha engordado pero su ánimo ya no es tan constante.
    
    No quiere viejitos pero los talluditos de cuarenta no la desean tanto.
    
    Nuestra forma de vida está cambiando y el modus vivendi cómodo se torna árido.
    
    Nuestros placeres se reducen y ahora la complacencia la encontramos en los recuerdos . La veo feliz y la sigo deseando , ahora que está jamona , me gusta más y su sonrisa burlona encandila a algún mirón que la desea.
    
    El el parque cuando entreabre sus piernas frente a un hombre , enseña sus bragas y cuca el ojo para saber bien si ella excita.
    
    De vez en cuando entra alguno y en la alcoba sigue encontrando placer.
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