No lo piensen, solo llénenme de semen. - Relatos Eróticos

No lo piensen, solo llénenme de semen.

... que mi cuello también lo estaba pues me ardía bastante, si Luis Enrique no me había terminado aun, esta vez estaba segura que lo haría; Ruben me abrió las piernas colocándose en medio de ellas, mientras Jonathan y Ramon se colocaban a mis lados, acercándose para que despues me tomaran de las manos y me pusieran en sus trozos en ellas, dejándome sentir como ardian bastante del calor que emanaban, por lo que de inmediato comencé masturbarlos, Ramon me puso una almohada en mi espada para que pudiese disfrutar del espectáculo que estaba por vivir, Ruben se acercó más a la entrada de mi zorrita, tomó su trozo con su mano para comenzar a golpear mi vagina, me abrió más las piernas y poco a poco me fue metiendo su hombría entera, solo pude abrir mi boca pues las fuerzas de gemir por el momento se me había ido, Jonathan giro mi cabeza y me puso a chuparle la polla así que saque mi lengua para iniciar a disfrura de ese pedazo de carne nuevamente, no paso más de medio minuto y esta vez Ramon me tomó de la cabeza y me hizo chuparsela ahora a él, ambos se fueron turnando para que yo le chupara la polla, mientras eso pasaba con mi boca, mi vagina estaba siendo castigada por el trozo de Ruben quien me penetraba durisismo, podía sentir como las paredes de mi vagina se deleitan de aquel nuevo inquilino, podía sentir como sus huevos golpeaban una y otra vez mi ano que estaba completamente mojado, así estuvimos unos 10 minutos logrando otro orgasmo más, Ruben me saco la polla y Jonathan me sentó en la cama pues esté se acostó y me pidió subir en él, así que me puese en posición de ranita pues quería ser yo quien tuviera el control de las embestidas, así que tomé el trozo de Jonathan y me senté en el poco a poco, mi vagina nuevamente ensanchó y comencé azotame en el trozo de mi macho, Rubén inmediatamente me empezó a nalguear y Ramon subió a la cama poniéndose frente a mí para que comenzará a chupársela otra vez, me sentía ya morir, quería que ya me bañaran de leche, pero tal parecía que mis machos aún no tenían ganas de llenarme de semen.

La cabeza me daba vueltas, me sentía agotada, pero feliz, mi vagina me dolía de tanta polla que estaba recibiendo, nose que tanto tiempo ya había pasado desde que llegué a ese departamento con esos tres macho de deliciosas pollas, solo sabía que estaba siendo un día fabuloso; Jonathan me bajo las piernas dejando la posición de ranita pero sin dejar de montarlo, me empino más hacia él y comenzó a chuparme los senos, marcandolos más de lo que ya estaban, Ramon se puso detrás, como pudo me abrió las nalgas y me empezó a lamer el ano, el tipo era todo un depravado, eso me encantaba, sinceramente quería que el fuera quien me llenará de semen mi vagina primero, pues la verdad era todo un monstruo para follar; Ramon lamió mi ano por completo jamás había sentido aquella sensación que me estaba haciendo vivir, toda mi piel se comenzó a erizar pues por un momento sentía que me follaria por el culo y la verdad ello jamás me había llamado ...