Segreto di confessione - Relatos Eróticos

Segreto di confessione

... una de mis compañeras de la escuela nos “descubrió” que estábamos en la calle paseando.

El objetivo era ese, el de pasear, divertirse en los parques y luego entrar a los centros comerciales, era algo agitado porque había que cambiarse de ropa para evitar ser vista o vistas como cuando nos pasó a mi (Saraí) y a mi amiga con el papá de una de mis compañeras que por cierto no nos llevábamos del todo, su papá era Francisco o Don Paco que más adelante describiré lo sucedido.

Era agitado y a su vez emocionante el irse de pinta porque por citar ejemplo, los centros comerciales abrían hasta casi el medio día, algunos comercios entre 11:00 en adelante y los cines las funciones apenas empezaban, había poca gente y la comida rápida pocos locales empezaban a dar servicio, en los parques los columpios estaban mojados por el sereno y lo mismo el pasto más aparte del frio de la mañana, la misión era regresar a cierta hora ya sea a la escuela como punto fijo o simplemente a la casa.

Bueno, Don Paco nos descubrió en aquel día porque llevábamos la misma falda y por nuestra corta edad nos interceptó en su auto, ofreciéndonos un raite o aventón, el cual por la hora, la vestimenta y ciertos detalles que no pudimos ocultar nos vimos al descubierto.

Don Paco: ¡Hola princesitas! ¿A dónde van? ¿Ya terminó la clase? Es muy temprano!!!

Nosotras: ¿Quién es usted? No lo conocemos.

Don Paco: Las conozco claro que sí, ustedes van a la misma escuela que mi hija, les doy un aventón (raite) súbanse.

(Yo no quería subirme, pero mi amiga Susana se metió al vehículo de inmediato como si fuera una mascota que obedecía al primer chiflido y obviamente al ir juntas procedí para acompañarla) obviamente de manera civilizada y política le agradecimos al señor el buen gesto.

Don Paco: Son muy traviesas, que bueno que las encontré a tiempo, que tal si las cachan sus mamás, en el lio que se meterían.

Nosotras: Gracias señor, solo fue una vez, no lo volveremos a hacer, no se lo diga a nadie.

Bueno de hecho quien hablaba era más mi amiga Susana, ella ya tenía experiencia en fugarse e irse de pinta y tenía mucha labia o mejor dicho verbo, lo que hizo el trayecto agradable y no tenso para nada como yo me lo imaginaba el trayecto con el Don, total, nos fuimos cada quien para su casa, pero quede algo espantada porque el señor ya nos había cachado por un lado pero por el otro me quedé con ciertas dudas ya que a mí por su mirada me ubicó de “golpe”.

Previamente a todo ello yo ya me había entregado a mi novio por amor y ya me había pasado después una situación que en otros relatos he comentado, aquí de manera resumida trata que me “raptaron” para abusar sexualmente de mi persona, cosa que de todos modos lo hicieron pero al ver que ya no era virgen, pues ya no les interesé para sus fines que tenían en mente, en base a ello y al cierto paso del tiempo las cosas te cambian de sobre manera, las ves con otra percepción eso por un lado pero por la parte que interesa, poco a ...